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¿Primarias abiertas?
Voces y ecos
Por Rafael Peralta Romero
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PodrÃase ignorar qué conviene a la democracia, si elecciones primarias abiertas o no abiertas en los partidos polÃticos. La suspicacia es un factor en la polÃtica dominicana y es muy probable que esa desconfianza que nos circula interiormente haya sido transmitida por prácticas impuras aplicadas desde el poder. Las primarias la revuelven.
Lo que nadie ignora es que quien apoya la forma de votación con padrón general, abierto a cualquier sufragante, es partidario del presidente Danilo Medina o beneficiario del gobierno. La vehemencia con la que éstos defienden tal pensamiento evidencia quienes andan en esa búsqueda. Lo que no veo es qué ganará Medina con esto.
La forma de escogencia de los candidatos a cargos públicos ha sido consignada en el proyecto de ley de Partidos y Organizaciones PolÃticas, aprobado vertiginosamente por el Senado, después que reposara durante décadas entre fólderes amarillosos. De repente, del danilismo se ha apoderado extraña prisa por aprobar el proyecto.
De diversos litorales han surgido opiniones en contra de las primarias abiertas. Los dueños del capital se han expresado a través de sus organizaciones: Consejo Nacional de la Empresa Privada y Asociación de Jóvenes Empresarios. Anje depositó en el Congreso su posición al respecto. Entregaron documento al presidente de la Cámara de Diputados.
"Cada partido debe tener potestad para decidir si es abierta o cerrada su primaria particular", expresaron. Entidades vinculadas a la vigilancia por la aplicación de la ley en pro de organizar la sociedad, como la Fundación Institucionalidad y Justicia, y Participación Ciudadana mostraron su pensar al respecto. Consideran improcedente el referido propósito.
La Iglesia Católica opinó a través de los obispos VÃctor Masalles y Jesús Castro Marte. "Los partidos polÃticos tienen que organizar sus elecciones internas ellos y no imponerles criterios con metodologÃa abierta". Castro, rector de la Universidad Católica Santo Domingo, ofreció ese escenario para que los lÃderes busquen un consenso sobre el asunto.
En tanto, ocho grupúsculos publican un comunicado para defender las primarias abiertas. Rúbricas de sus dueños, todos empleados del gobierno. La apariencia es el apoyo a la requerida Ley de Partidos que consideran "herramienta fundamental para recuperar la confianza y la credibilidad de los ciudadanos en las instituciones partidarias...".
El PRM, principal fuerza de la oposición, rechaza las primarias abiertas. Leonel Fernández, presidente del Partido de la Liberación Dominicana, también se opone. Repito: uno puede ignorar si conviene el controversial sistema de elección, pero es ostensible que los aliados y beneficiarios de Medina quieren las primaras abiertas y simultáneas. ¿Qué buscan?
